Experiencia Rava

CBA JAZZ | 2019

Experiencia Rava

El trompetista italiano se presentó con su agrupación en el Teatro del Libertador.

Enrico Rava (trompeta), Gianluca Petrella (trombón), Giovanni Guidi (piano), Francesco Diodati (guitarra), Gabriele Evangelista (contrabajo), Enrico Morello (batería).

Un verdadero seleccionado de lo mejor del jazz italiano (y por qué no de la escena mundial) se presentó en el teatro del libertador.

Rava, ligado sentimentalmente a nuestro país por diversas razones, propone junto a su agrupación la mixtura del jazz con música familiar a nuestras emociones. Enrico es el amalgama que aglutina a los mejores exponentes del jazz italiano para formar un combo explosivo.

Una experiencia inigualable se vive en el Teatro del Libertador cada vez que una agrupación de semejante calidad musical pisa el escenario. La recomendación fue guardar el celular, la cámara de fotos, la filmadora, porque nada se asemejará ni podrá siquiera estar cerca de reproducir la vivencia de escuchar el rasguido sutil de una cuerda de guitarra, el roce de una escobilla acompañado de un armónico de piano y el vibrar de un contrabajo en el pecho.

Inútil es tratar de registrar esa emoción del directo de Rava, esa comunión con el público que aplaudió de pie en cada oportunidad propicia. Es que el grupo italiano dio un show sin fisuras, yendo de la música popular hacia el free y regresando a territorio firme para el deleite de los presentes.

A pesar de su edad Rava es música joven, alegre, llena de vitalidad, en un marco que claramente comparte la misma visión y horizonte. Rava, quien, como todos los grandes músicos de jazz, nunca ha perdido la frescura de las ideas que llevan a inventar fórmulas, proyectos y construir nuevas asociaciones artísticas, logra como los grandes descubrir y potenciar a los músicos que lo acompañan, tal vez esta sea su enorme virtud y habilidad: El enorme Petrella en trombón, brindó un brillo inigualable, junto con Guidi en el piano simplemente dejaban que las cosas sucedieran. El interplay en su máxima expresión entre todos los integrantes del combo, sostenidos por los matices de Enrico Morello, enorme baterista siempre dispuesto a devolver la frase precisa en el momento preciso.

Difícil de enmarcar el show dentro de un estilo particular de jazz, si podemos decir que fue un juego abierto y divertido, y de interrelación entre sus músicos. Hacen simplemente lo que les viene en gana en ese momento sobre el escenario.

Evangelista es el soporte y la belleza del contrabajo puesta sobre el escenario sin exageraciones con un gusto refinado, al igual que Guidi en la guitarra exploran rítmicas y variantes propias del jazz sin agotar a la audiencia, todo un desafío logrado con soltura.

En el cierre Rava hizo participar al público entonando el clásico “Quizás, quizás, quizás” de Osvaldo Farrés, presentando su propia versión, permitiendo la improvisación de sus excelentes músicos y a la vez el juego con la audiencia. Un show exquisito en el cual quedó demostrado por qué es uno de los grupos mas reconocidos de Europa en la actualidad.

R.C.